Denegaron la libertad condicional solicitada por el cura Julio Grassi

Julio Grassi intentó por última vez acortar su pena tras las rejas y, por esa razón, esta semana solicitó la libertad condicional, amparándose en el artículo N°13 del Código Penal, cuyas líneas mencionan que todo preso tendrá la chance de pedirla siempre y cuando haya cumplido dos tercios de su condena.

Sin embargo, después de una larga audiencia que duró algunas horas, el Tribunal en lo Criminal N°1 de Morón presidido por la jueza Mariana Maldonado junto a los jueces Juan Carlos Uboldi y Claudio José Chaminade decidieron rechazar la solicitud. De este modo, Julio Grassi, de 68 años de edad, deberá permanecer en la Unidad Penitenciaria N°41 de Campana.

El cura acusado de pedofilia que se defendió a sí mismo por el título de abogacía que consiguió en la cárcel tendrá que cumplir de manera efectiva la condena hasta el 30 de mayo de 2028.

En primer término, el Tribunal por unanimidad rechazó el pedido de nulidad del dictamen del Departamento Técnico Criminológico que había sido pedido por el padre. Y en segunda instancia, antes de levantar la sesión, denegaron su libertad condicional. Cabe resaltar que el artículo N°14 del Código Penal rige que este beneficio no se le puede otorgar a los convictos que tengan una pena por delitos de índole sexual.

Inmutable en todo momento, Julio Grassi, que se presentó a la audiencia de manera remota desde la Unidad Penitenciaria de Campana, había ratificado su inocencia y pidió a los magistrados que tengan en cuenta que tengan en cuenta su rol: «Tienen que estar bien tranquilos ustedes, voy a ser útil para la sociedad, llevando nuevas ideas en el área de derecho en ejecución penal. Mi esencia es ayudar y tratar de cumplir mi vocación de sacerdote».

El 2 de septiembre se conocerán los argumentos del Tribunal

Las últimas palabras de Julio Grassi

Siendo las 12:50 horas y habiendo pasado una hora y media desde el comienzo de la sesión, Maldonado pidió que Grassi agilice el proceso con sus últimas palabras, que lógicamente polémica. «Yo quiero manifestar con sinceridad que deben quedarse tranquilos. Hay una continuidad en la vida de una persona», comenzó el padre.

«Durante todo este proceso me he comportado procesalmente bien con las causas que me han imputado, pero también dentro del penal, será también en la externación una continuididad de comportarme como corresponde y llevando adelante un proceso de reinserción social que es un derecho de toda persona que está penada y encarcelada», finalizó.

FUENTE: Minuto Neuquen