El Gobierno, a través del Ministerio de Economía, dispuso la eliminación del resumen mensual de las tarjetas de crédito en papel, cuya medida regirá a partir de este mismo viernes.
La decisión se dio a conocer mediante el decreto 361 publicado en el Boletín Oficial. El mismo establece que en adelante, los gastos realizados con el plástico serán enviados en formato digital, pues el resumen de las tarjetas de crédito ya no será enviado en físico a los clientes.
En ese sentido, la medida del Gobierno sostiene que, en caso de no recibir la notificación, la información sobre los gastos de las tarjetas de crédito podrán ser anunciados a través de una “comunicación telefónica, electrónica o similar”.
Además, señala que los clientes de los bancos no podrán oponerse a recibir el informe de forma virtual. “No deberá mediar oposición del usuario cuando su remisión fuera realizada en forma electrónica”.
La disposición tiene como objetivo “desregular y simplificar” el mercado de las tarjetas de crédito “adecuándose a los cambios recientes en modalidades de relacionamiento y tecnologías de digitalización”, según señala el decreto.
«Se debe reconstruir la economía a través de la inmediata eliminación de barreras y restricciones estatales que impiden su normal desarrollo, promoviendo al mismo tiempo una mayor inserción en el comercio mundial», argumentaron.
El Poder Ejecutivo justificó esta decisión en el marco del DNU 70/2023, que estableció una serie de medidas para desregular la economía. El Boletín Oficial lleva la firma del presidente, Javier Milei; el ministro de Economía, Luis Caputo; y el Jefe de Gabinete, Nicolás Posse.
Los clientes no pueden pagar el valor total de los consumos
Según datos del Banco Central, la morosidad en tarjetas de crédito tuvo una leve disminución en febrero, lo que representó el 1,7 % del total de las financiaciones. Sin embargo, esta cifra no refleja la situación completa, ya que no tiene en cuenta a aquellos que optan por el pago parcial del resumen del plástico.
Si bien la situación económica obliga a los usuarios a refinanciar sus deudas, las tasas de interés que se aplican en este proceso son muy altas, ya que oscilan entre el 122 % y el 390 %, lo que podría generar más dificultades para los clientes a largo plazo.
FUENTE: Minuto Neuquen